Klaus & Kinski (y el amor)

11/11/08

Dos grupos españoles en días consecutivos ocupando las páginas de Soyuz. Toda una rareza. Pero si CatPeople lo han bordado con su nuevo álbum repleto de grandes canciones en inglés, Klaus & Kinski han hecho lo propio y acaban de editar algunas de las mejores canciones que se han hecho en castellano en los últimos años. Han hecho un disco sin complejos, sin barreras estilísticas, se han mostrado imaginativos a más no poder en letras -están todas aquí- y música (culpa de Álex Martínez). Realmente hacía falta un grupo como ellos, valiente, arriesgado, que hacen lo que les gusta y les apetece, sin importarles si lo que sale es un batiburrillo de tecnopop, noise, bossa, country, folk, shoegaze, electrónica, canción melódica, indie-rock, bolero o lo que sea. Pero es que encima les sale bien, y "Tu hoguera está ardiendo" es entretenido, divertido y no deja de sorprender en cada escucha.

Mis momentos favoritos son "Nunca estás a la altura" (es un horror, / no paras de juzgar, / juzgar a ciencia cierta, / lo cierto es que soy yo. / Por teléfono es mucho peor, / vídeollamada, / vídeoenfadada), y "Crucifixión, la solución" (no me siento muy capaz de soportar / la humanidad, / no pienses mal, / se me pasa en un pispás / si no salgo nunca más) en donde un pequeño vendaval de guitarras toman el mando de las canciones arropando la delicada voz de Marina Gómez.

Pero en realidad también lo son "Teléfono de la esperanza" (si ya no puede ser peor, / y te quieres matar, / pues yo te ayudo. / Marca el número), "Muerte en Plasencia" (cuídense de lo trascendental, / compren más / para no pensar…) y "Lo que no cura mata" (hay un trecho enorme entre los dos, / una diferencia de color. / Hay cosas que mejor no pensar, / pues no vaya a ser que sí / que sea verdad) que consiguen que la tristeza se vuelva exultante y a la vez la alegría decaiga como un párpado inundado.

Y pensándolo bien también cuando las melodías de juguete de "La mano de Santa Teresa de Jesús" (y conservarte en formol, / meterte al congelador, / o guardar todas tus uñas / en un frasco de cristal. / Cómo puedo conservar / lo que no puedo controlar), "El Cristo del Perdón" y "En la cama" (te pido por favor / ¿puedo pasar la noche aquí?. / No me pienso mover, / ni siquiera te vas a enterar, / o tal vez sí) logran, sin saber cómo, traer tantos buenos recuerdos que, por supuesto, has vuelto a tergiversar a tu favor.

Y también "Mengele y el amor", "Sintigo o sin ti", "Rocanrolear"...al final encuentras refugio en todas y cada una de las canciones de "Tu hoguera está ardiendo", una para cada estado de ánimo, todas para disfrutar de un pop de ése que dicen "con mayúsculas".

Este es un disco que crea excitación después de la expectación, de los que tienen más capas que una cebolla (y en esas capas están La Buena Vida, My Bloody Valentine, Family, New Order, Los Planetas, Los Panchos, The Wedding Present, Nosoträsh, Stereolab, Vainica Doble, etc, etc.), así que conviene darle a la cebolla para descubrirla y redescubrirla hasta agotarles y agotarnos. x Gabi Lombardo

1 comentario

the Jau one ha dicho...

mola mola, rompo a buscar