El Río Infinito de Pink Floyd, para siempre Postales desde el asilo (55)

12/11/14

“Float down a river forever and ever, Emily, Emily...” (See Emily Play, 1967)
“Time pass / The River rolls” (Sorrow, 1987)
“The Water flowing / The Endless River / Forever and Ever” (High Hopes, 1994)

Una melodía que se diluye en un conjunto. Otra nueva nace. Un grupo de músicos desapareciendo en 2014. Un nuevo grupo surgiendo en 1967. Entre los amigos, Syd Barrett, seducido y destruido por el LSD, trauma para el grupo, descabezado. En 1973, la seducción de la industria, del dinero, que mina al grupo, las relaciones, decisivamente. La ruptura, progresiva desde finales de los 70 y la aparente disolución. La difícil recuperación sin Roger Waters, la vejez, un Río testigo de la vida que se va, la muerte de Richard Wright en 2008 y el trauma, la desaparición del grupo. Veinte años después del álbum de la comunicación y la incomunicación, de las campanas que llaman al funeral, un álbum inesperado surgido de las catacumbas, de los versos finales de la canción de los muertos, “High Hopes”, en el río del estudio flotante Astoria, de la suma de las partes, que ya apenas suman pues ya no quedan partes. En horas y horas de ensayos, de grabaciones, buceando, David Gilmour y Nick Mason, con la ayuda de Phil Manzanera y el ingeniero Andy Jackson, intentan tapar los agujeros del barco antes que desaparezca, un fragmento de 1968, del Otoño de ese año, un sonido olvidado, las señales de vida que quedaron, En Memoria De (Anisina), el amigo que ya no existe, que toca desde el otro mundo, desde horas y horas de un río infinito de música, desde un lugar que tampoco existe, el de la juventud, el de la vida.

The Endless River es la desaparición, el exorcismo de resistencia a la muerte, al río, al tiempo que se lo lleva todo. Un remero en un mar de nubes, sin Aguas (sin Waters), perdido en otro mundo, en el más allá. Es el río infinito, un bucle que nunca termina, porque “Más alto que las palabras… las cosas que quedaron sin decir”. (Louder than Words… Things Left Unsaid)

Una melodía que se diluye en el conjunto. x Sergio Casado.


(The Endless River de Pink Floyd se publica en noviembre de 2014)

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