Luna, Flowers, Bigott y Calavera en La Lata 15fest Riguroso directo

26/4/15

Ha sido una gran alegría que Luna se hayan vuelto a reunir para hacer una gira, y que además hayan pasado por España y Zaragoza. Tras muchísimos años de leal seguidor de todos los pasos de Dean Wareham, incluyendo su admirable autobiografía "Postales negras", podría volver a ver al grupo en nuestra ciudad gracias a La Lata de Bombillas que celebraba su decimoquinto aniversario. La otra ocasión fue en El Rincón de Goya.
Su reunión se ha producido con la que fue su última formación, con Lee Wall a la batería, Britta Phillips al bajo y Sean Eden a la guitarra acompañando a Dean Wareham, guitarra y voz. En Las Armas, Luna sonaron perfectos, engrasados igual o incluso mejor que en sus tiempos de máxima actividad, quizá por la relajación con la que se les vio y que seguramente da el saber lo que se ha hecho y dónde estás ubicado. La conexión entre las dos guitarras de Wareham y Eden fue espectacular, fueron guitarras planeadoras, elegantes, con unas réplicas extraordinarias entre ambos. No sin motivo sus héroes son Television y Velvet Underground. Como fan me hubiera gustado otro repertorio basado en mis favoritas de sus ocho discos, pero no hay queja posible cuando un grupo te ofrece tal cascada de sensaciones pletóricas. Su concierto me duró un suspiro. Luna estuvieron enormes, ese es el recuerdo que me va a quedar.

Antes de Luna, salió al escenario Bigott. Me gustaría mucho conocer la opinión de alguien que les haya visto en esta noche por primera vez, pero los que los hemos visto cuatro, cinco, seis veces, como es mi caso, su concierto me resultó un poco rutinario, de piloto automático, de pasar el trámite. Con canciones como "Pavement tree", "Dead mum walking", "Baby Lemonade", "Cannibal dinner" y tantas buenas canciones que tiene Bigott es difícil hacer un mal concierto, que no fue el caso, pero la única ocasión que se llegó a traspasar la línea de la emoción -y no es la primera vez- fue en la interpretación en solitario que hizo Clara de "We'll dance", con un silencio atronador en toda la sala.

Antes de Bigott, abrieron la noche Calavera, que siguen paso a paso haciéndose un nombre en esta tierra y pronto más allá. Las cálidas canciones de piel que conforman su nuevo trabajo, "El monte del perdón", sonaron estupendamente dejando claro que la banda está cada vez más cohesionada en directo. Gran momento especial fue su interpretación de "El hombre bombilla" de El Niño Gusano.

Y después de Luna, y cerrando la noche, actuaron los británicos Flowers. La espantada que hubo de personal dejó claro lo de siempre, que la gente va a los festivales (grandes, o pequeños como este) a ver al grupo que le interesa, y no a descubrir a alguna posible sorpresa. No hay curiosidad. Flowers son tres jovencillos, Sam, Rachel y Jordan, quizá con poco glamour rockero ni imagen de postureo, pero centrados en sus buenas canciones que tienen el punto de mira en las bandas de Sarah Records, del C86, de Wedding Present, en definitiva, de muchos grupos de guitarras de finales de los ochenta. Su patrón se basa en la voz tirando a angelical de Rachel envuelta por los guitarrazos jangle y noise de Sam, pendiente de ella en todo momento. Una propuesta interesante para amantes del indiepop británico primigenio.

Una noche de grupos y sonidos variados. Enhorabuena a La Lata por sus quince años y por no cejar en el empeño de seguir trayendo buenos grupos a Zaragoza. x A. Hurtado

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