"El café celestial" (Stuart Murdoch) A los que leen. Capítulo XXV

6/2/17

"El café celestial" (Pomona Books, 2001; Expediciones Polares, 2016) se puede considerar una analogía escrita de la música de Belle & Sebastian: modosita, agradable, dulce, inofensiva. Celestial. Así es este libro de Stuart Murdoch, autor del libro y de la mayor parte de la música de este grupo escocés que tan alto llegó con sus primeros discos en la segunda mitad de los años noventa.

Así pues, nadie deberá buscar en este libro truculencias de rockstar, ingredientes de la mala vida noctámbula, desavenencias personales entre miembros de la banda, prácticamente ningún tipo de mal sentimiento. Más bien al contrario, Murdoch -this charming man- incide en muchos episodios del libro en su fe cristiana, su devoción por Dios y en visitar a menudo su parroquia. Un gracias a la vida, que me ha dado tanto.

Hay que asumir que así es Stuart Murdoch, y así son Belle & Sebastian, y "El café celestial" (deliciosa portada) es un diario de alguien de costumbres sencillas y entregado en cuerpo y alma al grupo que ha creado, con anotaciones concretamente concernientes al período 2002-2006, lustro que incluyó sus discos "Dear catastrophe waitress" y "The life pursuit". Por tanto, es una lectura claramente only for fans que, más allá de deleitarnos con la forma de vida del cantante y compositor, que no resulta apasionante pero sí amena, busca conocer un poco más y mejor la esencia de la vida del músico y su entorno.

Lo mejor del libro, indudablemente, recae en todo el vasto conocimiento de música (y de películas también, es un fan de Hal Hartley, por ejemplo) que atesora Murdoch, -que tocará muy de cerca a todo fan de Belle & Sebastian, pues incluye en lugar preeminente a tótems indie como The Smiths, Felt, Cocteau Twins, The Fall y New Order, entre muchos otros artistas y otros estilos-, y que están reunidos en una excelente lista creada por su editorial en España Expediciones Polares. Aunque suelo necesitar absoluto silencio para la lectura, en esta ocasión ha sido un verdadero placer compaginar la lectura de "El café celestial" con la escucha de esta fantástica lista. x Fernando SoYoung

10 extractos de "El café celestial"

"Mi concepto del paraíso es un camino de campo abandonado en un día templado, sentado en la bici, andando sin manos, paseando por los valles entre la vegetación en una leve cuesta abajo. Mis pensamientos van girando hacia las canciones y hacia otros asuntos apetecibles. No consigo imaginar una paz como esta en ningún otro lado. Creo que es mi nueva droga. El verano en Escocia. Es una lástima que haya que esperar tanto a que llegue".

"Sábado noche. La noche más solitaria de la semana. Me encantaría emborracharme hasta caerme de culo, estar en un club, pasar las horas gritando al oído a la gente sin parar y terminar yendo a casa de alguien a buscar más bebida. Pero es algo que hago cada vez menos. Me encanta bailar en la Glasgow School of Art, pero siempre me quedo atrapado en la duda de si ir o no ir y al final no voy casi nunca. Las once y media de la noche es ese momento en el que sabes que no vas a cruzar la puerta de casa. La maldición de las cadenas temáticas de televisión. Me absorben como si fueran arenas movedizas".

"Es curioso cómo a veces somos conscientes de que estamos tomando una decisión equivocada pero aun así la llevamos adelante".

"Ha sido un verano de rupturas, de gente que pasa, de cambio de casa, de personas que intentan moverse a toda velocidad para que no las atrape la melancolía. Me hubiera gustado que hubiera sido un verano en el que la música me hubiera devorado y hubiera tapado todos mis defectos. ¡La música nos limpia el alma!

"Si coges a una persona decente y la sientas al volante de un coche puede llegar a tener reacciones que nunca tendría si fuera paseando por la calle. Pon a alguien a cargo de un país y hará lo mismo".

"¿Sois conscientes de cuánto suaviza el final de la semana echar unos tragos? ¿Y de cómo esos tragos construyen puentes que te permiten pasar por encima de los momentos incómodos del fin de semana, especialmente el sábado por la noche y el domingo por la mañana? ¿De cómo echar un trago te proporciona en las situaciones sociales más tensas un traje acolchado como esos que se usan para adiestrar a los perros? ¿De cómo te aportan hasta una pequeña película con la que estar entretenido cuando la compañía comienza a aburrirte?

"Me siento como Sean, el novio de Sarah, que solía preocuparse pensando que si hacía zapping y aterrizaba por casualidad en alguna telecomedia mierdosa lo contabilizarían en el medidor de audiencia. Le aterrorizaba la idea de ser usado para promover la telebasura, aunque fuera anónimamente".

"Hartley, Altman, Woody Allen, Truffaut, Cassavetes, Mike Leigh. Estos hombres son reyes. Leigh es el mejor. Beethoven y Bach se mantienen a la altura, apabullándonos con su genio y con su legado, pero estos tíos pueden mirarlos cara a cara sabiendo todo lo que han aportado".

"Lo pasé tan sumamente bien en Fuji que sabía que los buenos tiempos no podían durar eternamente. Puede sonar pesimista, pero mi experiencia dice que es difícil mantenerse en la cima sin hundirse un poco en la depresión".

"Yo os digo: escuchad, chavales, disfrutad de la vida. Bebed en cuanto podáis, porque según vayáis haciéndoos mayores la vida comienza a pasar a toda velocidad. Disfrutadla, para que así cuando miréis atrás veinte años y vuestra vida parezca una película, sea una buena película, con una bonita fotografía y un argumento sacado de la nouvelle vague. Oh yeah!"