Herman Düne Con vistas al mar (106)

6/11/20

Teníamos ganas de David-Ivar “Yaya” Herman Düne. Nos apetecía conocer las canciones que ha compuesto durante la cuarentena en Los Ángeles. Según nos cuentan desde su discográfica, están escritas en su casa del barrio de San Pedro, cerca de donde Charles Bukowski pasó sus últimos años, un dato para añadir a la leyenda que se está forjando David como trovador bohemio guiado por la estela de Bob Dylan. “Notes from Vinegar Hill” es un disco sin urgencia que invita a recrearse en la escucha y detener el tiempo frente a una botella de vino. x Simón Zico

Herman Dune



El momento definitivo en el que decidiste que la música era imprescindible en tu vida.
Sabes, reflexionando un poco, siento que desde siempre he querido ser cantante y tocar la guitarra. Gracias a mi padre conseguí mi primera guitarra a los seis años, y me pasé toda la infancia tocándola. Cuando tenía trece años, mis padres tenían un vídeo y para mi cumpleaños me regalaron la cinta de la gira de Bob Dylan con los Heartbreakers de Tom Petty. A pesar de no tener muchas cintas, esa era la única que quería ver todo el rato, me quedaba dormido soñando que formaba parte de esa banda en el escenario. Nunca he querido hacer otra cosa distinta a ser músico, así que he canalizado mi obsesión hasta conseguirlo.

¿Tuviste algún ídolo musical en la infancia?
Desde luego. Me acuerdo de rezar para ser algún día tan cool como Bob Dylan, ya desde pequeño era mi obsesión. Bob Dylan, Bob Dylan y Bob Dylan. Mis padres tenían pocos discos, pero entre ellos estaban “John Wesley Harding”, “New Morning”, “Greatest Hits Vol. 1”, y “Greatest Hits Vol. 3”. Me los aprendí de memoria. Más tarde, sobre los 13 años llegué a The Beatles, y justo después empecé con bandas contemporáneas: Nirvana, Sonic Youth, The Mountain Goats. Pero mis héroes permanecían en el instituto: Bob Dylan y Elvis.
También tuve una etapa de idealizar a U2: “The Unforgettable Fire”, “The Joshua Tree” y “Rattle & Hum”. Y en mi adolescencia también hubo momentos para analizar a Chuck Berry, con su forma de tocar y escribir canciones, y por supuesto, Tthe Rolling Stones y The Velvet Underground.

Tu disco favorito anterior a 1990, y el de 1990 hasta hoy.
Antes de 1990: “New Morning” Bob Dylan, y “Rubber Soul” de The Beatles. En los 90, “Goo” de Sonic Youth. Y en los 2000, “Lookout Mountain, Lookout Sea” de The Silver Jews.

Cuéntanos algo curioso que te haya pasado en algún viaje por Europa.
Tengo muchas. He girado durante 200 días al año durante mucho tiempo. Llegó un momento en que me propuse encontrar una piscina en cada ciudad que tocase. Me encanta nadar y me quedaba un poco entumecido con tanto viaje en la furgoneta. Hice reseñas sobre las piscinas y las puntuaba desde Escocia a Italia, o desde Suecia a Andalucía. Tuve un blog llamado “Piscinas en gira”, que esperaba que pudiera ayudar a otros nadadores del indie rock en sus viajes.

¿Qué película has visto más veces?
“The Dark Knight” ("El caballero oscuro"). Además de la música y de Bob Dylan, también tengo una obsesión desde pequeño por Batman. Cuando se estrenó la primera de Tim Burton la vi once veces en el cine. No soy un fan incondicional de todas la películas de Christopher Nolan, pero creo que “The Dark Knight” es perfecta, la habré visto unas treinta veces.

Dos cosas positivas y dos cosas negativas que conozcas de España.
He visto a Pepe Habichuela tocar en una fiesta privada para pocas personas en un sótano. Es la vez que más me ha impresionado una persona tocando la guitarra. Me encanta “El Quijote”, un libro perfecto. También me declaro fan de Goya. Me gustan las patatas bravas, la cerveza Estrella y el zumo de naranja. Y por supuesto las películas de Almodóvar. “Volver” es mi favorita. Estudié arquitectura, y Cerdá y Gaudí me parecen fantásticos.
Y como algo negativo diría que es muy duro ser vegano estando de gira por España.

Descúbrenos a un músico o una banda que te guste mucho y que no conozca mucha gente.
Kyle McNeill y su disco “I was happy”. Kyle y yo hemos tocado juntos en Los Ángeles, él colabora en dos de mis discos, pero yo ya era fan suyo antes de ser amigos.



¿Qué concierto al que has asistido no olvidarás nunca?
Bob Dylan en la gira de “Good As I Been To You” con contrabajo y pedal steel. Condicionó mi gusto musical, era muy joven cuando lo vi. También me ha gustado mucho ver varias veces a Leonard Cohen, Kinky Friedman, Willie Nelson y Lucinda Williams.

El mejor consejo que te han dado.
Te contaré uno, cuando estábamos grabando “Sweet Thursday”, Kyle McNeill me dijo: “La emoción que sentimos en la sala de grabación es todo lo que permanecerá en el disco”. Es sencillo pero cierto, un gran consejo.

Por último, dinos quién crees que es el bueno, el feo y el malo de la música pop.
El bueno: buenas letras. El malo: baterías pasadas de volumen. El feo: los egos.

0 comentarios: