8/10/19
Lo digo siempre que me entusiasma un disco en catalán: no entiendo del todo las letras, pero entiendo mucho menos las canciones en francés y muchas de ellas me fascinan, o en inglés, que aunque no pille la mitad del texto o el sentido de la letra me da igual, si la música te llega hondo es objetivo cumplido. Es estupendo que de una canción te enamoren letra y música, pero si todo no puede ser, no pasa nada.
Así pues, aquí tenemos el segundo disco, también en su lengua, de Últim Cavall. Y repiten en la casa Discos de Kirlian, una de esas labels por las que se coge simpatía muy rápido. Recuerdo perfectamente su primer disco, "Records de Kyoto", cómo me impactaron sus canciones, y cómo me pareció uno de los mejores discos de ese año (2017) y, junto con Univers, los dos mejores grupos que había escuchado de la tierra vecina.
En "Alaska", afortunadamente, se reconocen las coordenadas del disco anterior. Y con esos mimbres, guitarras primorosas, buenas voces y espíritu de melancolía dreampop, añadimos un aumento de bonitos sonidos de sintetizador, unas veces en primer y otras en segundo plano, que enriquecen mucho las canciones. Así pues, es fácil quedarse pillado con canciones como "Varsòvia", "Tard", "Els llacs", "Alaska" y, en definitiva, de todo este disco completado con tanta inspiración. Viva el pop universal. x Fernando SoYoung
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