Expresiones tontas de oficina Listas inservibles (61)

11/9/13

1. "Cuánto ha tardado en venir el autobús, me ha costado llegar una hora de reloj". Siempre he deseado saber cuáles son esas horas que no son de reloj, perdidas en el éter, sin gravedad ni constreñimientos numerarios, para intentar conseguirlas, porque seguro que por ellas no pasa el tiempo, no envejecemos ni miramos al pasado con nostalgia. La búsqueda está siendo ardua, pero de momento, mis horas siguen siendo, todas, de reloj (independientemente de que lo lleve puesto en la muñeca o no).

2. "Buenos días. Por decir algo". ¿Cómo que por decir algo? Pues no digas nada. Normalmente esta frase se dice, con gesto contrariado además, cuando la mañana ha salido desapacible, con lluvia, frío o viento, o las tres cosas a la vez. Si por ese motivo (porque por motivos personales nunca es) te parece que el nuevo día no ha empezado bien para ti, mejor quedarse en un sencillo y correcto 'hola'.

3. "Si es un perro, me muerde". Esta gloriosa e imaginativa frase aparece cuando alguien está buscando algún objeto por todos los lados a los que le alcanza la vista, y de repente se da cuenta que lo tiene delante a un palmo de su nariz. Pero ¿por qué te iba a morder un perro por tenerlo cerca? ¿Sería a lo mejor un perro que llevara quince días sin probar bocado? Y además, ¿por qué un perro? ¿Por qué no algo más fiero como un oso o una hiena que ya puestos no solo te muerden sino que seguro que te devoran entero?

4. "-¿Qué tal estás? -De lunes". Otra que tal. El primer día de la semana no suele ser de nuestro agrado (salvo especímenes afortunados que disfrutan de su trabajo o que encuentran en ese día la feliz escapatoria a un fin de semana de familia y niños), y se suele escuchar con mucha frecuencia esta recurrente contestación, para hacer ver que el ánimo está justico y las ganas de trabajar brillan por su ausencia. Aunque alguna vez he oído el contrario optimista, estar 'de viernes', la cuestión es por qué motivo nunca se está 'de martes' o 'de jueves', es una marginación injustificable.

5. Especial saludos tontos de llegada y partida: "Me piro vampiro", "Hola caracola" y "Mañana más... ¡y mejor!"